“Venezuela avanza hacia un modelo revolucionario de Apropiación Social del Conocimiento”

Prensa SAPI

Así lo afirmo la Directora del Servicio Autónomo de la Propiedad Intelectual (SAPI), Arlen Piñate durante el seminario internacional: “Transferencia de Tecnología y Apropiación Social del Conocimiento”, llevado a cabo por el Ministerio del Poder Popular para el Comercio,a través del SAPI, el pasado 09 y 10 de diciembre, en las instalaciones del Museo de Arte Contemporáneo.

Piñate mencionó que las patentes han sido utilizadas como una ventaja comercial en el capitalismo, creando dependencia tecnológica para Venezuela y los países en desarrollo. “Nosotros vamos hacia un modelo de apropiación de conocimientos de características realmente socialistas, pensamos que el conocimiento incorporado a la tecnología debe abordarse desde su producción, transferencia y apropiación al colectivo, es decir, una verdadera apropiación social”.

La Directora del SAPI destacó que las transnacionales (en especial las farmacéuticas) concentran el conocimiento y no transfieren tecnología alguna a la sociedad perjudicando la salud del pueblo y concentrando ganancias de forma excesiva.

Durante su ponencia, Eva Romeu, especialista cubana, se refirió al concepto de conocimiento y propiedad intelectual e hizo énfasis en que muchas veces la tecnología adquirida no se ajusta a las necesidades reales. Resaltó también que la propiedad intelectual se ha convertido en un monopolio.

Por su parte, Fabián Pena, especialista argentino en propiedad intelectual demostró como en la Argentina la adhesión a los convenios de propiedad intelectual vigentes, se dieron siempre durante regímenes de facto o en la década neoliberal de los 90. “ Las leyes y normativas de marcas, patentes y transferencia de tecnología son antidemocráticas, crean exclusión y pobreza en todo el mundo” afirmó el especialista. “La propiedad industrial es antagónica con la apropiación social del conocimiento”, añadió durante su exposición en el auditórium del Museo de Arte Contemporáneo.

El superintendente de Inversiones Extranjeras de la República Bolivariana de Venezuela (SIEX), Manuel Figueroa, destacó en su ponencia que el organismo a su cargo instrumenta las políticas emanadas del MINCOMERCIO en materia de promoción, protección y registro de inversión y de contratos de tecnología, en el contexto del desarrollo integral del país. La visión del SIEX es promover, incentivar y difundir las ventajas y oportunidades de inversión en el país, en el marco de los requerimientos del tercer milenio, en miras a la construcción del socialismo del SIGLO XXI. Figueroa afirmó que en Venezuela se han realizado 676 contratos de tecnologías.

A su turno, la vicedirectora de la Oficina Cubana de la Propiedad Industrial (OCPI), profundizó en el tema de las licencias obligatorias y la salud pública, destacando como Mito que las patentes transfieran tecnología a los países en desarrollo, resaltando que los países desarrollados quieren aumentar la protección de las patentes.

Asimismo, la especialista cubana Liudmila Morán Martínez se refirió a aspectos técnicos relacionados con los contratos de licencias de tecnología recomendando contar con organismos dotados de capacidad profesional para llevar a cabo la evaluación técnica, examinar contratos, analizar estudios de factibilidad e implementar regulaciones que legitimen el control del Estado en estos procesos, entre algunos de los más destacados.

Finalmente, la profesora de la UNEFA, María Parra, insistió durante su intervención en la importancia de estar debidamente capacitados a la hora de iniciar una negociación para la transferencia de tecnología y que la apropiación social del conocimiento debería abrir una cátedra sobre los conocimientos indígenas, tanto en grado como en postgrado, “ese tipo de conocimientos que son tan importantes se debería de incorporar en la educación del venezolano”, añadió.

El Seminario Internacional fue llevado a cabo en el marco del convenio de cooperación integral Cuba-Venezuela con la finalidad de crear un espacio de debate para la construcción de una doctrina en materia de apropiación de conocimientos, en aras de la independencia económica y la consolidación de la soberanía nacional.