Jérémie Zimmerman: Se trata de no volver a cuando muy pocas personas podían conectarse



DIAGONAL: ¿Qué relación hay entre la SOPA y el ACTA?

JÉRÉMIE ZIMMERMAN: SOPA es la transposición del ACTA a la ley de EE UU, pero va más allá porque da poder a los intermediarios financieros para aplicar políticas de copyright. Es una reacción del Gobierno al caso de Wikileaks; ahora ha querido implicar a todos los intermediarios privados.

D.: ¿Se va a usar la SOPA para ejercer censura política?

J.Z.: Es inevitable que, una vez que comienzas a utilizar censura privada para cuestiones de copyright, la gente se acostumbre a este tipo de actuaciones. Y si lo normalizas para proteger la propiedad intelectual, ¿por qué no lo vas a hacer para cosas más importantes como, por ejemplo, luchar contra el terrorismo? Además, una vez que las empresas hayan implementado los mecanismos técnicos para controlar y bloquear las comunicaciones, querrán amortizar su inversión, por lo que es de esperar que encuentren más aplicaciones para ellos.

D.: Un efecto positivo podría ser que más gente deje de utilizar los servicios comerciales de estas empresas e impulse proyectos autogestionados...

J.Z.: Sí, los hackers siempre tendremos métodos para saltarnos las restricciones y construir alternativas, pero ¿quién va a poder hacerlo? ¿Van a saber conectarse mi madre o mi peluquero? Se trata de no volver a la edad oscura, la internet de 1990, cuando sólo algunas pocas personas con conocimientos técnicos podían acceder a información en la red.

D.: ¿Cuándo llegará ACTA a la Unión Europea?

J.Z.: Será recibida en los próximos días en la INTA (comisión de comercio internacional), lo que inicia el proceso formal. Después hay varias comisiones que tienen que estudiarlo y dictar sus opiniones. No sabemos cuándo se votará en el Parlamento, pero en todo caso no antes de marzo, lo cual nos da tiempo para movilizar a la opinión pública.

D.: ¿Qué se está preparando?

J.Z.: Estamos trabajando en una campaña de correos electrónicos para decirle a los eurodiputados lo que pensamos. Para que se exprese la ciudadanía en general y también las empresas del sector tecnológico a las que no les interesa que se limiten las funcionalidades de sus productos. En La Quadrature du Net trabajamos en red con activistas de toda Europa, colectivos como Telecomix, Chaos Computer Club, X.net, Hacktivistas...

D.: ¿Y qué pasaría si se consiguiera parar el ACTA en el Parlamento Europeo?

J.Z.: Sería un símbolo político enorme porque se rompería la lógica represiva que se está siguiendo, según la cual cada nueva ley que se aprueba es más dura que la anterior. Abriría la posibilidad de desplazar la agenda política de cara a próximas directivas sobre propiedad intelectual. Es decir, si se aprueba el ACTA, lo que se legisle después seguirá la línea represiva de la SOPA en EE UU; si no, tendremos la ocasión de que en el futuro se tengan en cuenta las protestas y podamos negociar para que se revisen estas políticas.

D.: Siempre quedaría la lucha contra la aplicación de leyes aprobadas, como el caso de la Hadopi en Francia.

J.Z.: Con la Hadopi no se ha llegado hasta el final, sólo se han mandado advertencias pero nadie ha sido denunciado. Dicen los políticos que por ahora sólo quieren hacer pedagogía, pero yo creo que es porque saben que si llegaran a juicio lo perderían. De todas maneras esa ley, como la Sinde española, ya está muerta porque ni siquiera sirve para impedir el intercambio de archivos. Ahora la amenaza es el ACTA, una nueva estrategia más adecuada para frenar las prácticas habituales de los internautas.

Objetivo: garantizar la neutralidad

La intención frustrada del Ministerio de Cultura de reavivar la Ley Sinde ha reactivado la resistencia en internet. Desde el colectivo Hacktivistas prevén que el nuevo Gobierno del PP continúe la senda restrictiva. Uno de sus miembros, Txarlie, afirma que “podrían tratar de reformar la Ley de Propiedad Intelectual para eliminar el derecho a la copia privada”. En su opinón, “igual que nos echan de las plazas para que no hagamos asambleas, quieren dificultar el acceso a internet, que los servicios se gradúen según el dinero que pague cada persona”. La batalla está en preservar la neutralidad de la red. “Hasta ahora ha sido imposible conseguir legislación garantista como la de Chile y Holanda, pero seguiremos presionando”.

Construcción colaborativa del conocimiento

Fundación Vía Libre


El Área de Tecnología Educativa (FFyH-UNC) y la Fundación Vía Libre invitan a la presentación del libro: “Construcción colaborativa del conocimiento”; compilado por Gunnar Wolf y Alejandro Miranda con textos de Beatriz Busaniche, Carolina Flores, Alejandro Miranda, Lila Pagola, Érika Valverde, Héctor Colina, Antonio Galindo, Sergio Ordoñez, Marko Txopitea, Werner Westermann, Gunnar Wolf.

La presentación de esta publicación contará con comentarios a cargo de la Dra. Ximena Triquell (UNC- Conicet).

Sobre el libro

Lo que nos define como humanos es nuestra capacidad, por un lado, de crear conocimiento, y por otro, de compartirlo o comunicarlo con nuestros semejantes. Ambos rasgos se han engranado a lo largo de decenas de miles de años; al unirlos, el conocimiento trasciende al individuo, evitando la necesidad de redescubrir o reinventar lo que ya sabemos. Compartir el conocimiento es lo que llevó a nuestra especie al rol dominante que hoy en día ocupa.

El presente libro es resultado del trabajo que durante un año se efectuó en el seminario «Construcción Colaborativa del Conocimiento» poniendo en práctica las nuevas formas de producción de los contenidos.

En este libro, once autores de muy diferentes orígenes disciplinarios y geográficos abordan cómo en un mundo hiper-comunicado se han modificado las reglas básicas de la interacción en áreas tan distintas como la creación artística, las organizaciones sociales, el desarrollo de código de computadora, la educación o el sector productivo.

La presentación tendrá lugar el jueves 15 de diciembre, a las 18 hs, en la Sala D del Pabellón Residencial, Facultad de Filosofía y Humanidades, ciudad universitaria, Córdoba, Argentina.

El libro puede descargarse libremente en: http://seminario.edusol.info/seco3/pdf/seco3.pdf

Esperamos contar con su presencia. Se agradece la difusión

“La Red siempre es la misma, somos nosotros quienes la hacemos nueva”

Alt1040

Tim O’Reilly, fundador, CEO de O’Reilly Media, conocido por haber acuñado el término Web 2.0, estuvo hace unos días en Madrid con ocasión del Foro Internacional de Contenidos Digitales (FICOD) hablando del futuro de la web. En momentos en los que SOPA es una grave amenaza para la web tal como la conocemos y que el debate entre derechos de creadores y difusión de la cultura está más que vigente, aprovechamos para conocer su visión sobre estos temas.

ALT1040 - El régimen de propiedad intelectual claramente no funciona. ¿Cuál es su postura acerca de la doble retórica de los EE.UU. con respecto a la libertad de expresión y la aplicación de los derechos de autor?

Tim O’Reilly - El régimen de propiedad intelectual está efectivamente roto, y sí, los Estados Unidos están diciendo cosas contradictorias sobre el tema.

ALT1040 - Se ha dicho mucho sobre SOPA, incluso gente de Creative Commons ha dicho que una de los primeros afectados será el software libre, ¿cuál es su opinión sobre esto?

Alex Howard publicó un largo artículo sobre este tema el otro día en el O’Reilly Radar. Estoy de acuerdo con todo lo que dice allí.

No creo que el impacto en el software libre sea tan grande como el que habría en la libre expresión y en la arquitectura de internet como un todo.

ALT1040 - SOPA en EEUU, la “Ley Sinde” en España, o HADOPI en Francia son tres casos de en los que los gobiernos muestran su distancia con la ciudadanía en materia de Internet. ¿Es posible llegar a un acuerdo entre las empresas de contenidos y usuarios, sin la restricción de sus derechos?

Tim O’Reilly - Creo que las industrias de contenidos necesitan superar eso de proteger su pasado y seguir adelante con la creación de su futuro. Establecer barreras legales hostiles a lo que los consumidores realmente quieren es siempre una estrategia perdedora.

ALT1040 - ¿Por qué las distribuciones de Linux se quedaron tan atrás en la competencia con Apple y Microsoft?

Tim O’Reilly - Sí y no. Linux es el “Intel Inside” de la próxima generación de aplicaciones para ordenadores - piensa en Google, Amazon, Facebook y así.

ALT1040 - Como editor, ¿cuál cree que será el futuro de los libros de papel? ¿Y cuál será el rol de las tablets?

Tim O’Reilly - Es importante empezar a pensar en la función que cumplen los libros, más que en la forma de los libros. Después de todo, el futuro de un manual técnico es muy diferente que el futuro para una novela. Muchos tipos de libros (incluyendo diccionarios, enciclopedias, atlas, guías de restaurantes e incluso guías de viaje) están mejor presentados por aplicaciones (ya sean en web o móviles) que por libros de papel hoy. Las novelas populares compiten con los juegos. Pero como le gusta decir a Jeff Bezos, Hemingway no se vuelve mejor por estar a colores.

Sin embargo, yo sí creo que los libros de papel están de salida, y esto será más bien pronto que tarde. No habrá demanda para ellos bastante tiempo después del colapso del canal de distribución, que hace su producción demasiado costosa. La impresión bajo demanda puede funcionar, pero si la única forma de comprarlos es mediante internet, la gente comienza a optar cada vez más por la distribución online.

Mientras los libros electrónicos sólo son el 40% de nuestras ventas totales en O’Reilly, representan el 80% de nuestras ventas directas en oreilly.com - cuando la gente está comprando en un solo lugar, eligen masivamente el formato electrónico. Por supuesto, esto también se debe a la enorme expansión de nuestro mercado en todo el mundo. Estamos vendiendo libros electrónicos en países en los que nunca hemos vendido un libro impreso.

ALT1040 - Siete años atrás, creaste el término “web 2.0”, ¿estamos ahora en una nueva era de la Web?

Tim O’Reilly - La Red siempre es la misma, somos nosotros quienes la hacemos nueva. Web 2.0 no se refiere a una nueva versión de la web, sino a su vuelta después del descalabro de las puntocom.

Pero sin duda ahora los dispositivos móviles y los sensores están marcando la nueva dirección de la web de manera profunda.